El gatito gris.
Hace muuucho tiempo conocí a mi amiga Lola,
desde entonces somos muy
buenos amigos, espero que vosotros también
tengais muchos amigos y me
incluyan a mi, Lola tenía, un gatito de
peluche gris
con ojos azules y el pelo muy suave, ahora
está algo viejito pues ya no
somos tan pequeños, pero aún se ve en su
boquita Ia sonrisa de un juguete
que ha sido muy feliz.
Lola quería mucho a sus juguetes, pero al
gatito gris más que a ninguno,
constantemente Io abrazaba y dormía con él.
Sucedió que de tanto jugar
con el gatito y de los muchos besos y mimos
que le daba se le rompió una
patita, Lola se puso
muy triste, Io acostó con cuidado y le dijo:
-No llores, yo voy a curarte, buscaré hilo
gris y te Ia coseré con cuidado.
Así Io hizo, pasó algún tiempo cosiendo,
cuando termino besó a su gatito y
Io acostó de nuevo. Esa
noche cuando Lola dormía los juguetes se pusieron
a conversar y el patito
de goma dijo:
-Ya el gatito gris tiene su pata arreglada,
podrá correr y jugar de nuevo.
El gatito gris miró su patita y comenzó a
llorar y quejarse ¿qué le sucedía?,
muy sencillo, Ia niña sin
darse cuenta cosió Ia pata al revés.
-No llores, Ia niña te
Ia arreglará, ella es muy buena- dijo Ia pelota.
Pero al día siguiente Ia niña no si dio
cuenta y siguió jugando con él. Así
pasaron varios días y este seguía triste.
-No puedes seguir así,
ya sé Io que haré.-dijo Ia muñeca rubia.
Se acercó cuando Ia niña dormía y muy despacio le dijo al
oído:
-Gatito gris tiene una patita
torcida.
Cuando Lola despertó fue enseguida a ver a su querido peluche. -jPobrecito!,
yo que creía que te había curado, espera le pediré ayuda a mamá-dijo Ia pequeña y salió
corriendo.
La mama ayudó a
descoser y colocar bien Ia patita, ahora el gatito gris esbozaba en sus labios
una encantadora sonrisa.
Diccionario
Esbozaba= gesto de la cara, una sonrisa
MIGUEL GARCIA ROBLES